sin título

Las gotas siguen cayendo, el ambiente se vuelve mas frio, el agua que corre por la calle ha mojado mis pantalones, mis piernas se entumen, pero mi caminar es pausado... nunca me había sentido tan tranquilo. Sólo veo la gente correr a resguardarse de la lluvia, pero por primera vez estoy dejando que esta lluvia se lleve todo lo que no quiero, es hora de dejar atrás todo lo malo y comenzar de nuevo.

Escrito una tarde después de la lluvia.

[escucho: grace • kate havnevik]

good life

Es super relajante cuando las cosas comienzan a encajar perfectamente, o al menos de una manera más rápida, como si las piezas del rompecabezas que andaban perdidas se hallaron y terminan de completar mi vida. Sé que vienen muchas responsabilidades y que habrá que adaptarse a cosas nuevas, pero el que no evoluciona, muere... así que evolucionaré.

Soy feliz, simplemente puedo decir que ahora soy feliz. Las cosas van bien y todo pinta mucho mejor. Es sorprendente, hasta canturreo por las mañanas, me rio mucho, más de lo que antes lo hacía, cocino, charlo, conozco gente, estoy en paz conmigo. Vaya que cambiar de aires ha sido bueno. Soy feliz, muy feliz.

falling or flying

Llega un momento en la vida en que te agobian muchas cosas... ese momento me llegó hace poco, me agobiaba mi vida personal, mi vida laboral... estar lejos de mi familia, en pocas palabras, sentía que estaba suspendido en mi vida, que las cosas se volvían monótonas y mecánicas. Y ahí estaba yo, enmedio de la nada. Y es cuando me pregunté cuál es el siguiente paso: ¿caer o seguir volando?

Y decidí caer, dejé que todo los miedos salieran... fueron 7 días muy malos, me compliqué, grité, lloré, me enojé y al final la calma reinó. Bien dicen que no hay mal que duré 100 años... y menos si uno lucha por resolver las cosas. Ha sido un momento crítico en mi vida, puedo decir que este año he recibido las peores y las mejores cosas de mi vida... y al hacer el promedio puedo decir que soy feliz, en la justa y posible medida en que se puede ser.

Descubrí, entre muchas otras cosas, que siempre hay personas que te apoyan, y muchas veces son las que menos esperas. Pero a fin de cuentas, en estas cuestiones solamente uno decide cuando ponerles fin y comnezar a trabajar en ellas. A fin de cuentas es uno mismo el que tiene que tomar las riendas de su vida.

lluvia interna

alguna vez ya había escrito sobre esto, sobre lo bien que me hace llorar, cuando siento que no estoy completo o cuando las expectativas que tengo de mi vida me sobrepasan. Y lloro, y me hace bien, y no hay nada que me haga sentir mejor que eso. Pero en este momento, en este tiempo, me siento aterrado y no puedo gritar, lo intento y no sale ningún sonido, y quiero que mi lluvia interna calme todo el dolor que siento... y ni una gota, no hay nada.

Y estoy seguro que no he llorado todo lo que tengo que llorar... no ha sido suficiente, lo intento una y otra vez y no hay nada, estoy seco... Sólo quiero volver a tener razones para sentirme vivo, y para ser feliz... y para poder seguir luchando, aunque la mayor parte del tiempo me sienta solo en esta batalla.

[escucho: naked as we came • iron & wine]

camaleón

Hay un momento en la vida, en que uno hace un alto y revisa el camino que va marcando, y cuesta trabajo reconocer a la persona que uno va dejando atrás; es mentira que las personas no pueden cambiar, vamos cambiando con cada decisión que tomamos, vamos siendo mejores o peores personas, así de simple... y así de claro. Y no vale arrepentirse, no vale sentir culpa por los daños afectados.

Todos hemos sufrido, a todos nos han hecho daño[poco o mucho]. Y también nosotros hemos hecho daño, a nosotros mismos y a los que queremos[o no]. No es gratuito responder de esta manera agresiva ante las situaciones que nos presenta la vida, sólo respondemos en la misma medida en que hemos recibido, y respondemos con todo el sentimiento que tenemos dentro, en la mayoría de los casos, te aseguro, lo hacemos de manera inconsciente.

Y es aquí donde radica la diferencia entre unos y otros: ¿Qué tan responsable eres de tus actos? ¿Qué tan dispuesto estás a reparar todo el daño que causaste? Eso [en realidad] cuesta mucho trabajo.

[escucho: new day•kate havnevik]

la felicidad[fatalidad] de escribir

Hay cosas que no le puedes confiar a nadie, porque son tus secretos, y cuando ese "algo" lo sabe más de una persona deja de ser un secreto. Es por eso que encuentro felicidad en el escribir, porque aunque muchos amigos leen lo que escribo sólo algunos (los menos) entienden de qué hablo. Las personas no me conocen completamente, hay muchas cosas que supongo que no imaginan que haría o que diría. Es muy difícl guardarse todo esto, pero a veces es la solución para que la vida continúe. Por eso mi felicidad radica en poder escribir, lo lean o no, eso al final no cuenta mucho, porque cuando escribo voy sacando todo ese miedo que a veces ya no me deja continuar... pero siempre hay una solución para empezar de nuevo.

[escucho: entre dientes•jannette chao]

defendiendo mi espacio personal

Muchas veces lucho por defender mi espacio personal, no resisto que nadie cruce la línea de mi territorio físico, mucho menos aún mi territorio emocional. Para mi es fácil evidenciar cuando alguien cruza esa línea, me sé toda una serie de gestos, ademanes y no me importa ser grosero, sólo soy así, no resisto tener a alguien demasiado cerca, si no es que así lo quiero. Soy aún más protector de mi guarida emocional, no dejo que nadie se acerque, incluso a los amigos más íntimos les pido que respeten una distancia... porque sé que cuando entren en ese lugar será muy difícil dejarlos ir.

Pero a decir verdad... detrás de esos enojos, molestias, gestos y ademanes... me siento feliz de que aún existan personas que quieran invadir mi espacio personal. Saber, ser, sentir, vivir... la verdad que nos gusta complicarnos la vida.

[escucho: bend & break • keane]